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entre
los 0 y los 7 meses
Un recién nacido pasa la mayor parte del día durmiendo, por eso debemos prestar atención al espacio
asignado para esto.
Asegúrate de que la
altura desde el borde superior de la baranda de
la cuna hasta la base del colchón sea la adecuada y que los espacios entre los barrotes cumplan la
normativa vigente y mantén siempre puesto el protector de la cuna.
No dejes al niño
solo en una superficie elevada como el cambiador o una mesa.
El tener un
hermanito o un primito es motivo de felicidad para toda la familia, pero no
permitas que los niños mayores lleven en brazos al bebé, no tienen la misma fuerza, ni reflejos que un adulto.
En el transporte en
automóvil utiliza siempre los dispositivos de seguridad
homologados y las puertas del carro con seguro de niño.
Si tienes dudas
donde dejar al niño y/o niña, mejor déjalo en el suelo.
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entre
los 8 y los 12 meses
Tu pequeño ha
empezado a gatear y su espacio de juego se va a ampliar, tendrás que
evitar que se haga daño con los muebles, armarte de paciencia y deja a
la mano del pequeño aquellos objetos que no se rompan.
No pongas juguetes grandes
en la cuna o en el parque infantil, el niño los puede utilizar como escalera y
se puede salir.
Si vives en una
casa de dos pisos, pon barreras de seguridad en la
parte inferior y superior de las escaleras.
Protege las
esquinas de los muebles con esquineras de plástico y tapa los
enchufes, existen pequeños dispositivos adaptados para tal fin.
Retira todo aquello
que el niño pueda usar como elevador para alcanzar
las ventanas y asegúrate de que tengan unos cierres que no pueda abrir con facilidad.
pon protectores en las puertas para que no se
cierren con un golpe de aire y les machuque las manitos.
Evita poner en las
mesas manteles largos de los que pueda
tirar con el peligro de que se le caiga encima algún plato caliente.
Todos los expertos
en desarrollo infantil desaconsejan el uso
de caminadores.
En los viajes en el carro sigue utilizando los dispositivos de
seguridad homologados.
Si tu hijo tiene
una caída seria consulta con tu pediatra.
Cualquier
precaución es poca, por eso ten siempre a mano los teléfonos de urgencias y del
pediatra.
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entre los 12 meses y los 6 años
A
partir de ahora tu hijo ya sabe caminar y se convertirá en el terremoto de la
casa, su curiosidad no tiene límites por lo que tendrás que estar siempre con
cien mil ojos para que esos posibles accidentes infantiles no se produzcan.
A tu hijo
le encantará salir corriendo por todos lados, así que evita que haya objetos por
medio o juguetes que pueda pisar o con los que se pueda tropezar, caerse o darse un golpe.
Procura que la iluminación de la casa sea suficiente sobre todo
en las escaleras.
En esta etapa dejará la cuna y pasará a dormir en su propia cama,
si decides que duerma en camarote, es mejor que
use la cama inferior, si por tener otro hermanito
más pequeño pasa
a ocupar la superior, ponle barandillas para evitar las caídas.
No pongas la silla de comer cerca de otros muebles contra los que
pueda empujarse con las piernas y perder el equilibrio, sujétalo siempre con un
cinturón.
Usa
siempre vajilla de plástico. No uses tenedores.
No dejar que los niños jueguen solos en la cocina y si están contigo mantenlos alejados
de los fogones o de aparatos eléctricos.
Mucho cuidado con los productos de limpieza,
procura que no estén a su alcance, conservarlos en sus envases originales, no
llenes con ellos botellas de refrescos u otras similares.
Coloca en la bañera alfombras antideslizantes o pegatinas que eviten que pueda
resbalar, no le dejes solo nunca mientras se baña.
Evita
que el niño transporte o manipule objetos punzantes metálicos, de vidrio,
etc,etc,etc.
Cuidado al abrir y cerrar las puertas.
Cuidado al abrir y cerrar las puertas.
Seguir usando en el automóvil las sillas y dispositivos de seguridad
adecuados.
Lleva a tus hijos a jugar a parques infantiles que cuente con aparatos lúdicos adaptados a su edad y cuyos materiales de
construcción sean madera o plástico. Observa que el parque esté limpio, sin
excrementos de animales y que el mobiliario
esté en buen estado.
En esta edad lo más importante
es el ejemplo que demos a nuestros hijos, por lo que nuestra actitud ante
determinadas cosas son determinantes para los hábitos de seguridad y prevención
de nuestros hijos, por ejemplo ponerte el cinturón
de seguridad en el coche, no cruzar los semáforos en rojo, evitar
el uso del alcohol, tabaco y drogas, alimentarse sanamente y cepillarte los
dientes dos veces al día y el uso diario del hilo dental.
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